Monday, November 28, 2016

controlando los impulsos violentos

Se suma otra alumna, empiezan a ser una multitud. Por un lado ya no hay máquinas, por otro lado tal vez sea mejor que compartan las máquinas, porque así tienen que trabajar por pares, y tal vez se diviertan mas. Y tal vez les sea mas fácil lidiar con los problemas de las máquinas, de a dos. Este sería un grupo de 5, y no se como va a funcionar con un número impar. 

Ayer Lulu empezó baile dos veces por semana, lo que incluye tomarse un colectivo para ir y para volver, es un colectivo especial solo para los chicos de la escuela. Son dos dias por semana y la verdad es que me alegra que salga un poco y no esté tanto tiempo mirando series. Ayer estuvo todo el día afuera y empezó a ver series a eso de las 6 y media de la tarde, y cuando le dije que se le había terminado el tiempo, a las 7, le agarró un ataque. Pero creo que son los ataques que le agarran cuando se pasa de cansancio. Empieza a gritar con una voz aguda y a exigir todo tipo de cosas y a las 7 de la noche, a mi que me levanto a las 5 de la mañana o antes, me dan una ganas terribles de darle un cachetazo y resetearla. Ella grita, yo grito, un desastre. Ayer logré controlar mis impulsos violentos y la abracé, y funcionó. Luego le dije que lo llamara al padre y el vino, y yo le dije que quería dormir con Lulu, de alguna manera creo que cada tanto necesitamos reconectar, y dormir juntas es una de las pocas cosas que nos gusta a las dos, pero estaba tan manija que inclusive dormida seguía moviéndose. Pero hoy se levantó muy contenta y mas o menos las cosas transcurrieron en armonía. 

Con toda esta plata que está entrando con las clases me estoy dando permiso para comprar telas y moldes, es un montón de trabajo comprar. Ahora estoy cosiéndome otros pantalones y los pantalones fracaso mejoraron un poco luego del lavado.

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