Pavadas matinales

Hoy es viernes, el sábado judío. Los viernes slash sábados, los chicos van a la escuela medio día. Está bueno, es el día de los padres, siempre pienso que lo deben haber instaurado para que los padres puedan reproducirse. Hace mucho que vengo fantaseando en tener estas 3 horas y media para mi. He fantaseado en dar clases de costura, aunque supongo que va a quedar en fantasía. Para poder dar clases de costura necesito tener limpia la casa, y como el año pasado, voy atrasada en el mantenimiento de la casa.

MM llevó a Lulu a la escuela y Pepe duerme. Yo estoy en el dilema si despertarlo o no, o si esperar que se despierte y llevarlo al jardín, o no llevarlo.

Bueno, se despertó. Pepe ahora está durmiendo algo así como 11 horas. Mis hijos jamás pasan la marca de las 11 horas. Me está costando muchísimo tenerlos dormidos a las 8, es mas bién 8 y media, y ayer fué mas bien 8 y 45.

Ayer Pepe me agotó. Que tenga una bici me imagino que es algo bueno para el, pero no para mi. Ayer se bajó de la bici unas 10 veces cuando volvíamos. Todo fué a fuerza de mini discutir. Pero hay que reconocer que está muchísimo mas civilizado, no hubo ningún problema con ningún chico en la plaza, los problemas parecen ser entre el y yo. Por ejemplo, lo voy a hamacar, pero no logro hamacarlo como quiere y es una discusión de 10 minutos. Obvio que puedo decirle - bueno, yo te hamaco así y si no te gusta jodete -, pero ese tipo de respuestas requieren mucha energía. Y ayer le di ese tipo de respuestas varias veces. Creo que está agotado.

Sigo, al final decidí quedarme con Pepe en casa. A las 11 es el acto de Lulu.

Estuve contando a diferentes personas el episodio con la nena que le pegó a Pepe y a la que le dije -sabés que?, te lo mereces- Todos concuerdan que estuvo mal, sin embargo no me queda claro por qué.