la vida sigue

Pepe va al jardín en monopatín y seguimos discutiendo sobre si puede ir al jardín solo o no. Todavía no llegamos a un acuerdo, pero discutir es parte de nuestra relación, generalmente discutimos sobre caramelos y helados, así que la verdad que estoy contenta de que hablemos sobre otra cosa, porque a veces, cuando otra vez me empieza a tratar de convencer que le compre un caramelo, me dan ganas de llorar. Cuantas horas se puede puede hablar de caramelos? El chico se levanta y lo primero que hace es preguntarme que dia es para saber si es uno de los dos dias semanales en que compramos golosinas. Se me acaba de ocurrir una idea....le voy a dibujar un calendario y que se vaya organizando. Igual ahora hemos cambiado la rutina, ya que abrieron la pileta y entonces vamos a comprar las golosinas en la pileta, y creo que como no puede ver las golosinas (el kiosko tiene una ventana alta) y además hay mucha menos variedad, por ahí las cosas mejoran con la obsesión por las golosinas. Igual no se si le gustan tanto, lo que sospecho es que le gusta es hablar conmigo sobre ellas, fundamentalmente quejarse. Se queja bastante Pepe y a veces me pregunto si no es mi ejemplo. Lulu se queja de la misma manera pero por los tiempos de internet, los dulces no le interesan tanto.

Ayer descubrí que puedo nadar bastante en la pileta si quiero. Pepe suele hacer una media hora intensiva de chapuzones y luego le gusta descansar y comer fruta, así que me da tiempo para nadar. Es un poco estresante, porque es peligroso, sabe nadar apenas, pero si yo le digo que no se meta en la pileta de los grandes sin mi, el lo va a acatar a rajatabla. Pepe es muy cauteloso. Tambien puedo encomendarlo a los miles de padres que están ahi sentados haciendo de babysitters. Muchas mamas ni se ponen malla, aunque he notado que cuanto mas gorda la mamá, menos se mete a la pileta. Lulu por otra parte nada perfectamente y también es cautelosa. 

Desde que nos mudamos he dejado de andar en bici y de correr. Es como que la otra casa te invitaba a hacerlo, está no, y además cada vez tengo menos tiempo.

MM dice que no está dispuesto a cerrar el capítulo de construcción, al menos que yo le de un ultimatum. Yo creia que le había dado un ultimatum, pero es cierto que tuve un momento de duda, y así estamos.

Con la casa estoy mucho mejor, evidentemente me adapté. Mi esquema mental es que estoy viviendo en un departamento. No tengo ninguna ilusión de sentarme afuera en los proximos dos años e hice las paces con la realidad. Claro que en agosto cuando el calor es sofocante no se como me sentiré....Por otro lado la casa tiene una temperatura muy agradable, pasamos unos dias de calor sofocante muy comodamente, y eso que faltan cosas como aleros y persianas. También es muy linda la casa, la forma que tiene. Son dos cubos austeros, pero de alguna manera MM logró que las proporciones sean perfectas. 

El otro día estaba tratando de tener una cena convencional con Lulu y Pepe, combatiendo la idea de Lulu de tener una cena mirando el ipad (su idea de la cena ideal) y tratando de mantener una conversación. Le pregunto a Lulu -Como fué el viaje que hicieron en la escuela?- Aburrido- me dice, con aire de "vos sabés la respuesta perfectamente, para que preguntás" . -Con quien te sentaste en el colectivo?- Con Shai y Amit, y ahora me vas a preguntar - y hace el signo de comillas con los deditos, con el aire mas despectivo que pueden imaginarse - "quien es Amit? "- Y yo estallé en carcajadas, porque esa era la pregunta que tenía en la mente, y entonces se ofendió. Pobre, yo la entiendo, esas conversaciones que se me ocurren a mi, tipo interrogatorio, son horribles, pero por otro lado, creo que aunque la irriten, son mejor que nada. Igual yo se que si invierto tiempo y juego con ella logro una comunicación, solo que no tengo ese tiempo. 

Una cosa que ha pasado es que Lulu ha adoptado la bici nuevamente y se mueve con ella con total comodidad. Me alegro, porque ahora que hace tanto calor si tengo que caminar todos estos kilómetros que hago en el día me muero. Ayer ella estaba en lo de la abuela (es el día que pasa con la abuela cuando sale de la escuela) y yo la llamé y se vino a la pileta, y luego de la pileta nos volvimos. Es bien difícil la vuelta, hay un viento terrible, pero ella se arregla perfectamente. Lulu tiene muchísima fuerza, lo que es sorprendente, porque tiene un aspecto sumamente delicado. 

Una de las cosas que estamos compartiendo con Lulu es la lectura. Las dos podemos disfrutar del mismo libro, pero no es fácil encontrar libros que nos interesen a las dos. 

Hemos vuelto a dormir los tres juntos y felices. Cuando MM decida volver a la vida familar (volver? estuvo realmente alguna vez? no lo recuerdo) haremos la distribución convencional de los niños en sus camas y los padres en la cama matrimonial, pero ese futuro no lo veo nada cercano. 

Esta semana he estado mas conectada con el laburo, como que he tenido momentos de lucidez y he estado pensando, generalmente hago lo que me dicen que haga. El problema de pensar es que necesito estudiar para poder pensar, y pocas ganas tengo. A la vez me doy cuenta que puedo ser muy buena en esto de la microbiología. Adoro la parte de no pensar que tiene, la parte repetitiva me calma. También en la pileta hay tiempos buenos para estudiar, no se porqué. Supongo que es porque salgo corriendo del trabajo a buscarlo a Pepe y todavía mi mente está conectada en eso, y si pongo un par de papeles en el bolso los leo. Hasta ahora me la he pasado preguntando y siguiendo consejos de la gente con experiencia, pero ha llegado al momento en que ya no me pueden ayudar mas, y me doy cuenta de que a veces cometen errores porque saben poco de física o de matemática, o porque han dejado de interesarse. 

Otra cosa que he descubierto es que puedo dejar a los chicos solos por un período de tiempo corto, entonces puedo completar alguna tarea que me quedó sin hacer. Muchas veces no empiezo cosas en el trabajo porque a las 4 tengo que salir corriendo si o si, así que si puedo volver aunque sea 10 minutos, a veces eso significa que puedo ganar un día completo de trabajo. Un trick es tener chicles en el trabajo, si le digo a Pepe que se puede comer un chicle se viene contento sin quejarse. El puede ver películas en la computadora de la oficina mientras yo estoy en el laboratorio enfrente. El problema es que siempre me termino de comer los chicles yo.

Mi teléfono describe mi vida. A las 4 y medio está la alarma para despertarme, a las 6 y media la alarma que me avisa que se me terminó mi tiempo y que tengo que ponerme a prepararnos para salir a nuestras actividades, a las 4 menos cinco tengo una alarma que me avisa que necesito dejar todo y correr a buscar a Pepe, y ahora voy a poner una alarma para los dias que la voy a buscar a Lulu a la escuela al mediodía. Antes tenía una alarma que me avisaba la hora de empezar con la pesada tarea de convencerlos de bañarlos y cepillarles los dientes, pero ultimamente se ha facilitado y no tengo mas esa alarma. La alarma de las 4 es graciosa, porque dejo todo como está y me voy. Mi mesa de trabajo necesita ser ordenada urgente.