cronica de la commisceracion (o cronica de una muerte anunciada)

Los años buenos me commiscero un par de veces. Los años malos, como este, lo hago cada 15 dias, como un relojito suizo.
Me lo tomo con seriedad. Me lleva el dia completo: no salgo de la cama, o salgo poco, leo un libro completo, lloro y descanso. Al otro dia me levanto tan fresca como una lechuga.

La semana transcurrió sin incidentes y en picada. El martes MM se fue con los ositos a Israel. El miercoles feliz de estar sola, el jueves ya no tanto. No tan infeliz como para decir lo extraño -JAMAS!- pero casi.

El viernes casi me olvido del turno con la doctora de alto riesgo. Mi hija el bicho pesa dos libras 12 onzas lo que esta considerado una gran cosa en los charts fetales. Corro a una reunion con unos señores que poseen un campo de golf y un dique y todo es un pantano. Llueve.Voy a mirar un par de puentes. Bien hasta ahi, los señores del golf son muy Lords y estan fascinados con mi acento y mi barriga. Despues me pase la tarde trabajando para una planta nuclear que me llena de angustia. Los protocolos para una planta nuclear no son joda. Trabaje hasta casi las 9 de la noche, pero los últimos minutos los dedique a forrar un coso de corcho que tengo con una tela fucsia furioso. Cuando me fui todavia habia autos en el estacionamiento,

LLego a casa. No hay email de MM. No hay telefono. Pienso en venganzas, hasta que me doy cuenta que ya estoy muy vieja para cambiarle los nombres a mis emociones. (Para permitiirme tanta retardadez emocional)

MM antes de irse me trajo de la biblioteca unos cuantos libros. Entre ellos Misery the Stephen King. Cuando lo vi pense que era extraño. Claro que se debe acordar de mi fascinacion por The shining, pero ese era un CD book, un libro para mi autito, y otra cosa es papel. Pense....MM quiere que lo extrañe? Leyendo libros de terror en una casa inmensa de tres habitaciones?


Ayer cambié mi teoría. MM no quiere que lo extrañe, quiere que lo entienda. (Me avisó antes de irse que las comunicaciones iban a ser escasas y difíciles). El vive entre psicóticos y yo leo Misery. Not bad deal.


Entonces ayer me commisceré, como iba diciendo, todo el santo día, e hize lo previsible: lei Misery de cabo a rabo, comi sobras y crackers con dulce de leche y llore de a ratos. Mis amigas telefónicas no contestaron. Hasta pense en llamar a mi mamá, pero pensé que no iba a poder soportar su obligado ¨porqué llamás¨ rompiendo la barrera del email y desistí.

Tambien lei este blog de cabo a rabo.

(Cuando me commiscero
me voy a leer otras vidas
a ver si ellos
son mas felices que yo.)


A medianoche lo llamé. Las 8 en Israel. La abuela se está muriendo. Con dificultades pero logramos comunicarnos. MM me dice que que alguién esta tratando de llamar. Corto y vuelvo a llamar. Era la tia, huerfana inminente, que quiere un disco de Pavaroti.

Nos reimos como locos. Pavaroti como soundtrack entre beduinos moribundos para despedir a la vieja sudafricana en el hospital Soroka de Beersheva.

La abuela se muere. La abuela se murió.