Saturday, April 11, 2020

el high está bajando

Ayer le estuve cosiendo un par de remeras a Lulu. Es muy difícil coserle algo, porque me hace sentir que le estoy haciendo un favor al coserle algo. Me grita, no me presta atención. Está totalmente adicta a un juego del Nintendo Switch que se llama Zelda. Si fuese por ella no haría nada mas que eso. Se me acaba de cruzar la idea de dejarla con Zelda, todo el día, a ver si en algún momento se cansa. 

Al final le arreglé una remera que había salvado por linda, porque tenía unos bordados. Y ahora le estoy cosiendo una con unos restitos de tela de un vestido mío. Tiene un gusto super estricto para colores, telas y texturas. Por ejemplo, me rechazó unos pantalones que le cosí. Aunque no entiendo si no le gustan de verdad o si es una reacción como para decirme que ella es distinta.

No se si seguir con la quilt o seguir con la manufactura de remeras y corpiños. Quiero un par de remeras nuevas, me hacen muy féliz, no es que realmente las necesite. Tengo unas telas hermosas para remeras. Me hace sentir super rica tener tanta selección de remeras, aunque quiero cambiar un poco el patrón, hace ya como 3 años que vengo usando el mismo.

Sigo bien con la dieta, siento que estoy comiendo mucho menos, pero hoy me pesé y engordé. Supongo que es retención de líquidos, aunque no me muevo. 68.8!! Tan cerca de 70. Es un número que no me gusto nada ver esta mañana. 

Si sigo con la quilt, luego que termine con la blusa de Lulu, necesito cortar el batting y unirlo con zigzag, y pegar todas las capas. No se si necesito investigar un poco sobre como hacerlo. No logro recordar si usé adhesivo con la quilt blanca, creo que no. Si uso adhesivo necesito investigar un cacho. Hay que cortar el batting mas grande, porque el quilting distorsiona y sino la quilt empieza a ser cada vez mas chica.

Estoy leyéndole a Pepe Matilda. Es muy divertido. No logro recordar si lo leí o lo escuché antes.

Thursday, April 09, 2020

dieta


Hace 20 minutos que quiero escribir pero la computadora se resiste. Anda mal hace rato.

Quería hablar de las quilts. Se transformó en un proceso sumamente sentimental. Son dos, una para Pepe y otra para Lulu. Estoy haciendo el  backing para el quilt de Shem y quería poner un pedacito de una remera que cosí cuando era chiquito. La tela la compré en Boston, y es un negocio que amaba. Luego la llevé a una vacaciones en Argentina, con la idea de que iba a coser algo. Me acuerdo de mi mamá diciendo que le gustaba, obviamente nunca cosí nada y volvió a viajar a Boston en el mismo estado, pero de alguna manera sobrevivió hasta Israel. Cuando estaba cosiendo la remera me dí vuelta y Pepe encontró una tijera, y la empezó a cortar cuidadosamente. En esa época, y en realidad por mucho tiempo, cuando cortaba cosas sacaba la lenguita en un gesto de concentración que amaba. Es un gesto que cuando lo recuerdo me produce una especie de dolor, por su intensidad. El pedacito de tela no me pega en la composición, voy con el pedacito por toda la superficie y no logro acomodarlo. Tal vez lo ponga en el quilt de Lulu. Tal vez este sea el quilt de Lulu. 

Estoy tratando de hacer dieta. Sin grandes resultados por el momento, aunque es ridículo decir eso. Ayer logré comer un poco menos, ayer también me dí cuenta de lo redonda que estoy. También es útil para que los chicos paren de engordar. Pepe hace mucho que se está poniendo redondo, pero MM me dijo que inclusive Lulu se está redondeando. 

La dieta es la de hacer ayuno intermitente. Pero también controlando un poco las porciones y el contenido.


--
D.

Wednesday, April 01, 2020

las dos quilts de jeans.

Cerré el blog y lo dejé abierto sólo para dos amigas, que por suerte no leen, pero que podrían leer. Tal vez debería cerrarlo completamente, porque lo que quiero es escribir con libertad. O algo así. No me queda claro.

La situación es así. MM trabaja todo el tiempo, pero dormimos juntos y tomamos el primer café de la mañana juntos. Cogemos, en nuestra forma práctica y rápida. Como quien come cereal por las mañanas. El trabaja y ha estado trayendo dinero, cash, lo que en este momento me llena de tranquilidad. Es nuevo, como todo es nuevo en estos tiempos de Corona. Perdió su laburo contruyendo la casita para el glamping en el medio del desierto y consiguió un laburo de albañil, terminando paredes de durlock. Yo trabajo 10 horas, no es muy seguro cual va a ser mi salario en un mes. Nadie dice nada, nadie sabe nada. Es probable que me lo bajen, supongo. Los chicos están bien, hacemos deberes cada mañana, creo que soy capaz de enseñarles cosas útiles en relativamente poco tiempo. Hasta ahora los he estado llevando a un parque que hay aquí cerca, aunque tecnicamente es en contra de las nuevas regulaciones. Ayer no fuí, hubo una tormenta de polvo y también medio me cansé de la rutina del parque.

He vuelto a coser, le acabo de terminar una camisa a MM. Le cosí a Lulu dos pantalones. Uno no le gustó, dijo que " it doesnt agree with her aesthetics" . La verdad es que a mi si me gusta y estoy pensando en hacerme uno parecido. También pienso que es probable que le guste mas tarde. Pobre Lulu, quiere ser diferente pero creo que se viste sumamente parecido a mi. Ese es un pensamiento que analizaría si pudiese salir a andar en bici, pero tengo miedo. Por que digo pobre Lulu? Lo digo porque desear ser diferente de nuestras madres es una tarea difícil, sino imposible. 

Anteayer me enojé con Lulu porque le puso demasiado aceite a las galletitas y le trató de poner manteca, cuando yo la había llamado para pedirle que no le pusiese manteca. Me dijo que se olvidó. Le grité, como una desquiciada. Esa es mi mamá, surgiendo de mi. La única diferencia es que le pedí disculpas y logramos hacer las pases. Luego cuando jugamos al fútbol me dió unos golpes terribles. Es más, ayer guglié "problemas en le bazo" porque pensé que el dolor persistente que tengo en el costado izquierdo de las costillas era el bazo. Como siempre tengo la panza levemente hinchada siempre pienso que algún órgano interno está fallando, pero luego me dí cuenta que era un dolor muscular, o en las costillas, un dolor de hueso, ponele, no se si los huesos pueden doler.

Estoy en el medio de un proyecto de coser quilts de jean, un proyecto que hace mucho tengo en mente, años y años, tengo 4 cajas de jeans viejos. De alguna manera es un material hermoso, pero es muy difícil hacer un quilt bello. Muchas textura, demasiada, muchos jeans son elásticos. Hacer un quilt con telas elásticas  es complicado. Pero me imagino que si pudiese hacerlas sería un logro. Algo distinto, algo original. No se lo que quiero. Escribo apurada, ya me pasé de la hora en que debería darles el desayuno a los chicos. Y luego los deberes, necesito imprimir cosas. No es fácil darles deberes a los dos, lo menos que les interesa es el aprendizaje organizado.

Hay algo en jean que lo hace especial, creo que es una de las pocas cosas que aceptamos que envejezca. O sea, renegamos de las arrugas, las estrías, las descoloraciones pero en el jean las aceptamos y a veces, o en realidad, casi siempre, queremos jeans que tenga señales de uso. Entonces un quilt de jean es algo casi eterno. He estado hace rato mirando fotos de Boro, que es una técnica japonesa, de usar telas que han sido remendadas por años y años. Zurzido.

Bueno, ahora ya termino la camisa de MM y puedo seguir con las quilts. Quiero hacer dos, una para cada niño. Pero eso me trae al tema que me tiene ocupada, que es el tema del deseo de ser una artista. Ser una artista supongo que es liberarse del mandato interno de hacer algo práctico. Pero me cuesta, no puedo, y tal vez no deba luchar con ese mandato.

Por otro lado por ahí debería empezar con algo mas humilde, como un almohadón y ver como las texturas se acomodan en una superficie mas pequeña, aunque no estoy muy segura, tengo mas ganas de hacer algo relativamente chato, bidimensional, y no introducir el factor tridimensional.

Mi amiga K dijo que no me ve como artista, que lo mío es lo práctico. Necesito pensar en eso. Tal vez la pregunta es que es ser un artista.



--
D.

Tuesday, March 17, 2020

El delirio: pros and cons

Ayer fuí y me traje dos ramas gruesas de cactus. Quisiera plantar una y la otra usarla para experimentar. Me pregunto si debo empezar hoy con la cocción o esperar un poco. También me pregunto si este delirio nuevo es una reacción al virus Corona, cambiar un delirio por otro. La verdad es que hace mucho que leo sobre plantas alucinógenas, y hace mucho que vengo pensando en que, ya que soy tan DIY, es lógico que me fabrique las drogas, y los cactus tienen muchas ventajas, especialmente porque a MM le gustan mucho estéticamente. También porque imponen un límite. Son cactus que crecen con cierta lentitud, el riesgo de que me vuelva adicta es pequeño. He estado pensando que debería releer a Huxley y a Castaneda. O sea, a dos delirantes. Castaneda me atrae por la conexión con mi propio paisaje. 

Supongo que el riesgo mayor de este delirio es que me caiga en algún precipicio. 
--
D.

Monday, March 16, 2020

planes psicodélicos

Hoy salí en la bicicleta, la que sigue andando mal pese a todos los esfuerzos. Se me traba en las subidas. Igual ha llovido tanto que tuve que parar muchas veces ya que el camino está lleno de barro, y piedras. El desierto está lleno de flores y se parece mas al paisaje de mi infancia que al paisaje habitual de mis paseos por el desierto. Está lleno de florcitas, de pájaros trinando, de verde, y hoy hasta el río corría y se escuchaba el agua que fluía.

Desde que volví de Japón y entré en la cuarentena que no coso. No hago mas que trabajar, comer y dormir. Y ocuparme de la casa y de los chicos. Duermo mucho, como demasiado, ni siquiera es que la casa está mas limpia o mas ordenada. Es un misterio como el tiempo puede ser utilizado de distintas maneras, como se pueden hacer mas cosas o menos cosas en la misma cantidad de tiempo.

Es cierto que estoy muy ocupada siguiendo el virus corona. MM está casi desempleado y estamos pensando en que use su tiempo libre para avanzar con algún proyecto de la casa sin terminar, y eso también supongo que ocupa todo un lugar en la mente. 

En dos meses cumplo 50, o sea que he llegado a la mitad de mi vida, si todo sale como planeado. No tengo muchos planes, pero uno lo tengo muy claro y es que tengo que morirme a los 100 y llegar a esa avanzada edad lúcida y saludable, sencillamente porque vengo muy lento. 

En la cuarentena me deprimí y no hice nada de lo que me imaginaba que iba a hacer, no cosí, no hice yoga, no estudié nada. Solo armé un puzzle de mil piezas en un estado de manía intenso. Reafirmé que todo lo hago como una reacción negativa. Coso porque no quiero hacer ejercicio, hago ejercicio porque no quiero ir a trabajar y trabajo porque no me queda mas remedio. Es una desgracia ser así hija del rigor, o una procastinadora crónica. Bueno, quiero volver a esta idea mas adelante, pero lo quiero decir es que tal vez el saber que se me está acabando el tiempo me haga apurarme un poco, concentrarme un poco.

La cuestión es: concentrarme en que? 

Creo que quiero ser famosa. No muy famosa, un poco famosa. Que palabra tan ridícula! Famosa, tan ridícula como el concepto. Bah, que se yo. Bueno, si hay algo que vengo perdiendo a pasos acelerados, junto con el colágeno, es el temor al ridículo. 

Bueno, volveré a este concepto, el deseo de ser famosa, aunque quiero aclarar que, obviamente, quiero ser una artista textil o una escritora famosa, no es que quiero ser famosa por lo bien que sé maquillarme o algo así, quiero ser famosa en las dos cosas en las que creo que podría tener alguna posibilidad.

Pero quiero escribir sobre algo que me está ocupando la mente ultimamente, una idea que plantó en mi cabeza la amiga Espejismo.

 Resulta que la amiga Espejismo está buscando novio. Se le murió el papá y tiene mucho tiempo libre así que ahora se dedica a los novios y resulta que uno de los novios le comentó que quiere investigar en las drogas alucinógenas. Que pavada, dije yo. Y Espejismo me dijo que ninguna pavada, que segura que yo estaría interesada en hacer una sesión de Ayahuasca, que está tan de moda, especialmente entre persona con crisis de la mediana edad que quieren ser famosas, aunque no dijo exactamente eso, la parte de ser famosa no la dijo porque todavía no está al tanto de mi deseo. Y esa frase me trajo a la memoria un viejo proyecto de cultivar peyote, y cuando me puse a buscar en google, porque por supuesto ninguna de las dos nos acordamos de la palabra ayahuasca, me encontré que es muy probable que tengo  un cactus con alto contenido de mescalina en el patio de arriba. Por otro lado el catus ese está ahi, como yo, no va ni para atrás ni para adelante. Así que ayer fuí a ver a un viejo que cultiva cactus, muy apurada porque se me ocurrió que se puede morir en cualquier momento con este asunto del virus corona y me dió varios consejos. Yo pensaba que me iba a ayudar a identificar mi cactus pero el viejo está obviamente pero que yo de la memoria, además de que tiene la colección de cactus mas maravillosa imaginable.

Así que aquí estoy, muy entusiasmada con los cactus alucinógenos. Porque además descubrí que en un vivero abandonado de la universidad hay un San Pedro inmenso o sea que tengo un montón de material. Pero bueno, es todo un proyecto, el cómo dónde y cuando. La idea general es que con la ayuda del catus dilucidar a que quiero dedicarme estas 20 horas semanales que puedo exprimir de mi rutina.

Espero que este proyecto no me mate antes de llegar a la mediana edad.








 

La casa interminable

Estoy abrumada. Harta. Y cuando trato de explicar la situación a mis amigas las canso, no logran comprender. Hablo de la casa, la casita, na...