el viaje familiar

Terminé mis jeans, o bueno, casi, me faltan las presillas del cinturón y las tachas, pero ninguna de esas cosas son muy necesarias ya que raramente uso cinturón y las tachas son mas que nada un adorno, aunque son también son estructurales. Para las tachas necesito una pinza. Yo tengo una colección pequeña de herramientas que son solo para mi para que no desaparezcan, pero no tengo pinza. 

Desde que los terminé que no me los saco, me los dejé hasta para dormir una siesta el viernes, cuando me sentí terriblemente mal, no se por que, creo que estaba totalmente agotada. Estoy chocha. No veia la hora de sacarme los dos pares de pantalones rarísimos que me cosí antes, bueno, uno no es raro, pero es demasiado elegante para el resto de mi ropa.

Ahora quiera coserme otro antes de tener que lavar este, pero por otro lado me gustaría usarlo un par de dias mas para llegar a una conclusión. Me lo cosí con la pierna recta, o mas bien un skinny relajado y cintura baja. Quisiera ahora hacer uno igual pero con boot cut, pero también me gustaría subirle la cintura y también probar de hacermelos un poquito mas ajustados. Creo que lo mejor sería hacer una sola modificación, y cambiar el color del pespunte, y luego hacerme otro con otra modificación. Me quiero coser una media docena por lo menos, y el asunto es: puedo. Porque tengo metros y metros de jeans y gabardina y puedo comprarme mas facilmente porque Moshe en Tel Aviv vende jean italiano de una calidad bastante aceptable.

Ayer hicimos una excursión al mejor estilo clásico israelí familia clase media, excepto que Lulu no quiso venir y se quedó sola leyendo y mirando sus películas. Con otros amigos y sus hijos. Mas clishé imposible. Si nos divertimos, que se yo, si, pero la verdad verdad, me divierto mas en casa. Nunca nada supera quedarme en casa y coser o pintar o escribir y escuchar música. Pero son amigos copados e interesantes, tienen mellizos simpáticos. Pensaba que iba a odiar la experiencia de tener dos crios de dos años rompiendo las pelotas pero la verdad es que me divertí mucho. Hay algo en los niños que me recuerda mucho a mi misma: ese entusiasmo loco por vivir. 

Para el viaje me puse mi camisa y mis jeans, y me sentía en una pasarela. Como siga así me voy a tener que conseguir una vida para usar mis creaciones. 

Con todos estos problemas que Lulu está teniendo en la escuela he estado pensando un poco en mi infancia y en la forma que mi mente funciona, que creo que es la misma forma en que funciona la mente de Lulu. Aunque cuando digo problemas creo que tengo que para y considerar el hecho de que el boletín de Lulu llego y en todos los puntos le asignaron un muy bien, o un casi muy bien, y solo en matemática le pusieron un bien. El problema es que no le gusta la escuela, aunque he estado tratando de cambiar la situación y creo que lo logré un poco. He estado hablando con sus maestra y pensando en estrategias.