Sunday, January 24, 2016

Mi miniaturista

Me duele la garganta y estoy hecha una piltrafa. Tengo sarpullidos varios. La semana pasada comí quesos y panes y no me hizo muy bien, pero por otro lado todavía no puedo creer que no puedo comer ni harinas ni quesos. Necesito una confirmación profesional, pero no junto la energía para hacerme los estudios. Ayer fuimos a hacer un picnic a la casa nueva. Era un día gris y yo me había levantado tarde. Cuando me falta mi ritual de las 5 de la mañana, que consiste en estar SOLA con mi música y mi costura, me cuesta mucho todo. Pero a la vez es dificil despertarse en el medio de la noche y el frío, especialmente porque en la mitad de la noche Pepe se pasa y es tan lindo dormir con el! Pero bueno, hoy me desperté y terminé una orca que le cosí a Lulu para su clase de dolfines. Le cosí una orca y un dolfín, y podría seguir con toda la fauna marina. Eso me recuerda que le tengo que coser a Pepe los números. Seguimos muy bien con los números, ya cuenta hasta 10, y puede contar objetos, pero reconocer los números le está costando. Pero hoy por ejemplo se puso a escribirlos, y no le salieron nada mal. Pero vuelvo al picnic. Supuestamente nos queremos mudar en un mes y una semana, pero en la casa no hay ni cocina ni baño, ni están terminadas las paredes por dentro. Supongo que lo postergaremos. Estoy muy cansada de postergar y postergar. MM está contento y optimista con la casa. Supongo que cuando uno construye una casa se enamora de ella, me pasa con casi cualquier pelotudez que coso, al menos al principio. Pero ayer, mirando la montaña de tierra que está en frente de la ventana de nuestro living, me dió mucha desesperanza. Me acordé de la vista bellisíma que teníamos en la otra casa, todo el esfuerzo que pusimos en terminarla. ESTOY TAN HARTA. Pero bueno, hay que seguir paso a paso, es solo una cuesta difícil. Una cosa que me pone contenta es que Lulu lee, en voz alta, con dificultad, pero se ve que le gusta, porque muchas veces la encuentro concentrada leyendo algo. Ayer se durmió sola, leyendo. Pepe por otro lado me sorprende con sus dibujos. Le gusta mucho hacer rayas, es miniaturista.


2 comments:

Ale said...

y esta seria la casa definitiva? Por ahi para tomarlo con mas calma y poder enamorarte de la nueva casa tendrias que decidir quedarte en ella por lo menos 10 años, digo, por poner un numero, el para siempre es muy raro.

cronista sentimental said...

qué te mejores, linda. besos de un manojo de nervios a una piltrafa.

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