La semana pasada fue una gran semana o una semana de mierda, segun se lo mire. Desde el punto de vista de "a los 60 me siento a escribir novelas y san se acabo" fue grandiosa.
El mejor momento nos tuvo a MM y a mi como protagonistas unicos. Yo en la cama y MM parado en el vano de la puerta del dormitorio dandome un discurso en donde los puntos relevante fueron:
a- Lo tengo repodrido.
b- El masoquista no es y no esta dispuesto a aguantarme bajandole la cania dia y noche.
c- Que estar juntos porque es dificil separarse dadas las circunstancia no le va y que nos podriamos separar en un abrir y cerrar de ojos
d- Que si nos separamos se haria cargo de nuestras deudas.
e- Que se la lleva a Lulu el fin de semana (-no es lo suficientemente grande para tomar formula, acaso?-PreguntĆ³. Oh los hombres y su blissfull ignorance) para que me decida.
f- Que cometio errores, pero que los errores se remedian y la vida continua.
Yo, desde la cama lleguƩ a conclusiones muy interesantes:
a- Definitivamente MM me resulta mucho mas atractivo hablando en hebreo.
b- Definitavemente el mejor angulo de MM es desde abajo.
(Asi me enamorƩ de MM, el arriba de una escalera o andamio y yo haciendole monerias desde la superficie)
Ahora, vos imaginate que trabajar en ingles, comunicarme en hebreo con MM y escribir blogs en espaniol tiene sus complicaciones.
El fin de semana fue definitivamente bueno, con novela y sin novela.
El sabado me fui al gym con una amiga, vos fijate, que placer inusitado, con una amiga, con-una-amiga!! y escuchando Emily Wells y despues cafecito en Ula, un cafe muy hipster.
Y que el domingo a la maƱana otra vez me sucediĆ³ lo mismo, que fuimos a ver el rancho, y que yo, pensando en tomarme un cafe en el Dunkin Donuts de Duddley Square con los junkies y borrachos ni me lave los diente ni la cara ni me saque el piyama, y MM me gritĆ³ -Tomemos el colectivo y vamos a Flour!- y asi me encontre, con esa facha, tomando cafe en el cafe mas hipster de Boston. Esos son los problemas de vivir en una ciudad donde la gente que gana mas de $100,000 al anio y los que viven de la seguridad social estan separado por 10 cuadras.
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Y que el domingo a la tarde me llamĆ³ otra amiga y me dijo -Dale, vamonos a tomar un cafe- Y me dije el lujo de hacerme la rogada, y decir bueno, y en el tiempo que ella tardĆ³ en llegar yo me baƱƩ, me cepillĆ© finalmente los dientes y salĆ en mi bicicletita a encontrarla.
Hubo mucho mas, claro, pero tambien hay que trabajar