Friday, December 29, 2017

estoy harta de, primera parte

Esta semana he decidido no coser y tratar de escribir. No es fácil. Si me propongo escribir ya no tiene tanta gracia.

No es facil hacerse autoanálisis.

Por ejemplo, yo creo que tengo que escribir sobre el asunto de que MM no gana plata y trabaja todo el tiempo. Ahí está, lo dije.

A veces es cuestión de escupir las cosas.

No me había dado cuenta. Mi actitud frente al dinero es que yo se lo que gano, se que es mucho mas que suficiente para pagar la mitad de nuestros gastos, y bueno, yo espero llegar a fin de mes y, hace ya bastante, llegamos. Hace un tiempo MM tomó varios préstamos, que todavía estamos pagando (porque no llegamos). Creo que dos los terminamos de pagar en un par de meses.  O sea, por un lado MM gana como para pagar esa plata que tomó en préstamo.

Pero yo hace mucho quería contar algo gracioso y relacionado con el asunto. Hace un mes o algo así fuí a la reunión de padres y me encontré con la mujer del maestro. El maestro es el hijo de la señora dueña de la casa dónde vivimos mientras MM terminaba esta lo suficiente como para que fuera minimamente vivible. El negocio que hizo MM fué que en vez de pagarle alquiler le arreglaría esa casita una vez que nosotros nos fuésemos. A mi desde el principio me pareció muy mal negocio, jamás me cerraron los números y efectivamente no cerraron, y una de las deudas que pagamos todos los meses es por esa casita que, obviamente, quedó hermosa. Así que mientras charlaba con la mujer del maestro, que es una chica muy agradable, tanto como su marido el maestro, y ella mencionaba que MM refaccionó la casita, de la cual están muy contentos, obviamente, yo pensaba, yo te estoy pagando esa refacción.

Estoy harta de pagarles a los otros sus lindas casitas mientras la mia está sin terminar.



Thursday, December 21, 2017

la consistencia de la vida

Hola si que tal, tanto tiempo, me tomo 20 minutos escribo en el blog. Ultimamente estoy tensa, no se que pasa, aunque supongo que debe ser porque estoy mas ocupada, las dos clases de costura semanales que doy supongo que deben estar, como se dice? taking their toll. Además de que en el trabajo no tengo un minuto, es raro, no paro de trabajar, pero a la vez tengo la sensación de que no hago nada. Creo que es el mismo fenómeno que sucede durante el fin de semana, trato de coser algo, de hacer algo, pero el día se pasa en alcanzar vasos de agua (o en decir: no, servítelo vos), en cortar fruta, en lavar doscientos platitos y cubiertos, en juntar esto y lo otro, en llevar a los chicos de aquí para allá, en llamar a sus amigos. Y eso que estos chicos son muy independientes y el lugar donde vivimos hace que puedan moverse solos con mucha libertar. Igual estaba hablando del laboratorio, dónde me interrumpen mucho para pedirme cositas, no solo los estudiantes de mi laboratorio, sino también de otros laboratorios, creo que porque trato de ser simpática, porque creo que es parte de mi trabajo, hacer que los estudiantes se sientan bien, y por otro lado creo que porque soy una de las pocas personas que siempre están, sino estoy en el laboratorio estoy en la oficina de al lado. Bueno, no se que estoy tratando de decir con toda este discurso en dónde, en cierta manera, me autoalabo. Andaré necesitada de alabanzas? A veces me parece que nunca se sacía mi sed de alabanzas.

Hubo varias cosas que quise escribir pero que van quedando sepultadas en la avalancha de las pequeñas cositas que es la vida familiar. Por ejemplo que Pepe tuvo un brote mínimo de varicela. Pepe Pepe Pepito, es tan simpático, parece ser tan seguro de quien es. Supongo que en parte es lo que la suerte le ha dado, por un lado la genética, pero por otro lado desde que nació ha vivido una vida tan armoniosa. Todavía muchos días se despierta temprano y viene a subirse a mi regazo, con 6 años! Yo lo miro y todavía veo el bebé que fué y al que llevé pegado un año entero. 

De eso quería también hablar, aunque ya se me está terminando el tiempo. Hay algo en Pepe, creo que es su consistencia, algo que debe ser hormonal, que todavía hace que el abrazo sea fácil. Abrazar a Lulu es como abrazar algo duro, huraño, un animal salvaje, es otra consistencia. Ese pensamiento apareció porque el otro día levante el brazo frente al espejo y vi que la carne del brazo me cuelga con esa apariencia lunar de la carne de los viejos. Es raro, porque por otro lado no parece haber disminuido para nada ni mi fuerza proverbial ni mi energía. El otro día sin mas trepé una pendiente empinada de mi camino de montaña que siempre supuse que era demasiado empinada para mi (es que venía bajando un jeep, es la temporada donde la gente viene a hacer turismo) y lo logré. Pero mi consistencia está cambiando. Tengo ya esa blandura de la vejez. O es la blandura de las mujeres viejas? Los hombres viejos serán fibrosos? Bueno, no se, pero me pregunto si no hay un cambio hormonal que hace que volvamos a la blandura de los bebés. Porque hay algo en los bebés, una consistencia, algo difícil de definir. Mucha gente dice que tienen un olor. Yo creo que también tienen una consistencia especial, que la mantienen por muchos años, y un buen día la pierden, y hacen que el abrazo sea ya mas difícil. 

Bueno, me voy a ganarme el mango.

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D.

La casa interminable

Estoy abrumada. Harta. Y cuando trato de explicar la situación a mis amigas las canso, no logran comprender. Hablo de la casa, la casita, na...