Tendría que contarles de Portugal, de Rosa Pomar, de los avances de Pepe, pero de lo que yo de verdad quiero hablar es de corpiños. Porque ayer fui a Beer Sheva a comprarme un par, y oops, fué casi un fracaso.
Miren, lo que no entiendo, es como, en un país como Israel, caracterizado por dos cosas: el extremismo religioso y la teta enorme, yo tengo problemas para comprarme un humilde corpiño. Yo no pretendo mucho de un corpiño, en realidad, casi que no pretendo nada. No quiero que me suba las tetas, ni que me las baje, ni que me las achique, ni que me las agrande, ni que me las redondee. No quiero aros de alambre que se me claven en los costados, ni que perforen la tela despues de 5 lavado, no quiero que esten rellenos de gomaespuma porque me dan impresion los corpiños que parecen prótesis mamarias. Tampoco quiero que tengan puntillas y transparencias, que de puta no trabajo, y a MM le gusto sin, no veo porque tirar la plata en esas exquisiteses, especialmente porque las puntillas y trasparencias, suponiendo que vengan sin los artefactos de subir, bajar, achicar y agrandar, atentan contra la durabilidad del corpiño. Ahh, si, porque lo que pretendo durabilidad. Una cosa es un corpiño humilde un poco usado y otra cosa es un corpiño de encaje viejo. El primero safa, es segundo da mucho de puta sin laburo, con las hilachas de los encajes molestando por todos lados. En fin, la razon principal por la que quiero un corpiño es porque no quiero que me miren (ahí), y que saquen conclusiones, erróneas o no, que es lo que pasa cuando uno sale sin corpiño. Y un poco también que me las sujeten, si, eso también.
Había encontrado una marca, se llama Barely there, una genialidad de microfibra, que no se siente, ademas son baratos, porque tampoco me voy a empeñar por un copiño. Pensé que había solucionado mi problema, pero hete aquì que no los traen mas. O que los traen solo en verano. Expliquemen como es esto del corpiño de verano y el de invierno que no la tenía. Bahh, sehh, ya entiendo, los de invierno vienen con mas relleno, porque no quiero creer que hay gente que enfrenta un verano de 40 grados con almohaditas en las tetas transpiradas. Por dios que asco. En el invierno tiene mas sentido, al menos las tetas andan abrigadas con las almohadas.
En fin, lo bueno fué que tenía un corpiño de correr. Ahora, venian con almohaditas!!!!!!!!!!!! Hay muchachas que salen a correr con almohaditas en las tetas? En fin, que se pueden sacar las almohaditas.
Lo otro que no entiendo, es que yo, que soy flaca, o que se yo, normal, standar, uso el talle mas grande que tienen. Evidentemente las chicas tetonas no corren. Que hacen? Es cierto que ser tetona y correr es medio problematico. Recuedo que cuando recién lo parí a Pepe y estaba hecha un tonel, y tenía unas tetas enormes, correr era medio complicado.
En fin, tengo que hacer una investigación entre las madres de la plaza.
Ahora, les informo de algo que aprendí muy tarde en la vida: las almohaditas tienen una razón de ser, mal que me pese. En el mundo cooperativo de USA no se usa mostrar el pezón. Y el mundo cooperativo de USA está signado por los edificios de mala calidad, cubos enormes sin aislación, con ventanas herméticas y toneladas de aire acondicionado y calefacción, unos se congela en verano y suda en invierno. Un paseo por los corredores para ir a servirse un café te expone a un gradiente considerable de temperatura y ya sabemos lo que pasa con los pezones y los delta H. Y aquí la almohadilla viene bien, ya que con el acolchado el pezón parado pasa desapercibido. Yo lo aprendí tarde, después de haber recibido dos millones de miradas desorbitadas. Bah, desorbitadas pero sutiles, porque esas cosas en USA se disimulan.
Ahora pasemos a Portugal. Que pais raro Portugal. Como dijo una madre de las que comparte conmigo las interminables tardes en el parque de juegos -Portugal no es Europa, Portugal es el tercer mundo- Que horror la gente así eh, los que tiran esas aseveraciones sin que se les mueva un pelo, ninguna conciencia, ni social, ni política, nada de nada. Que bendición se así, esa sordera intelectual. Yo me quedé con ganas de contestarle -Vos queres decir que Portugal es el tercer mundo como nosotros?- (por nosotros léase Israel) pero soy un poco lenta para estas cosas, además de que tampoco me conviene enemistarme, que es la mamá de un pendejo que podría ser el compañerito de Pepe por años y años.
Pero hay un poco de eso. Yo lo llamaría un país extraordinariamente vintage. Por ejemplo, las vidrieras del centro están llenas de ropa de vieja. Algo inexplicable. Aunque en realidad, si es explicable. Ahora entiendo porque mi mamá se viste como una pendeja, es porque sencillamente no le queda otra, ya que en la Argentina se debe vender solo ropa de pendeja. Pendeja anorexica. Para colmo mi vieja da con el talle de anoréxica. En fin, conclusiones de alguien que no va a la Argentina hace un buen par de años. Pero cuando paseaba por Lisboa todas las vidrieras me hacian acordar a las vidrieras de Palermo de cuando tenía yo 10 años y miraba ropa con mi abuela. Todo sedas y telas pesadas en colores oscuros y cortes discretos. Mucha mercería, que se llaman retrosarias, y que mas retro que una mercería, no? Es cierto que ahora las mercerías estan in, pero estas mercerías tenían aspecto de estar en funcionamiento hace un medio siglo como mínimo. Y en consecuencia las mujeres se visten "clásico". Les gusta muchísimo el cuero, les enloquecen las botas, y eso que la temperatura era de 20 grados. A mi, que andaba de sandalias, me miraban MAL. Literalmente MAL. También les gusta mucho el pelo planchadito. En fin, me causó gracia que se usase el estilo ese de la argentina cheta "mi papa tiene campo", del jean y la camisa blanca, los aritos de perla y el pelo atado atras en un pony tail. Cola de caballo? Bueno, si, claro, una hija de ganadero debe usar una cola de caballo, nada más coherente.
La gente es muy simpática, esa fué mi impresión, y con una simpatía muy atinada, muy creible, muy natural. Y no hay chicos en Portugal, aunque esa podría ser una impresión con una gran bias, ya que aquí en Israel la cantidad de niños ya asquea, es como con las ardillas en el Central Park.
Yo fuí a visitar a Rosa Pomar y me invitó a una cosa muy linda: un conjunto de señoras que cardan lana mientras cantan. Tuve oportunidad de ver todos los procesos que se somete a la lana hasta su tejido, y como cantaban, por dios, que increible. Las señoras eran del Norte de Portugal, y estaban todas vestidas con zuecos, camisa blanca, falda negra, pañoleta sobre los hombros, y joyas de oro. Excepto una que estaba toda de negro, supongo que porque era viuda. Los expectadores preguntaban detalles del proceso, lo que yo quería preguntar era si todos los días se vestía así, pero me contuve, no me conviene enemistarme con Rosa Pomar. La cosa es que mi impresión es que las señoras muy distindo no se deben vestir, les digo que este país es de los mas vintage.
De Lisboa nos fuimos a Arrifana, por la cuestión de las olas. Muy buena la ola de Arrifana, aunque no tuvimos la mejor suerte. Bahh, yo si porque la ola era buena para los principiantes como yo, pero MM se aburrió un poco.
Me pasé las dos semana sin hacer una sinopsis, ayudada en gran medida por 50 shades of gray, el que no pude terminar, a la mitad renuncié. Que misterio ese libro. Yo lo queria leer por el asunto de ser mainstream, que es uno de mis objetivos en la vida, pero también para informarme sobre el sadomasoquismo. Pero pasé bien la mitad del libro, y de masoquismo no leí nada, aunque es tan aburrido que creo que lo leía dormida, y por ahi se me pasó. Es una historia de amor contada superficialmente, donde el usa camisas de lino blanco, arrugaditas, y jeans gastados, y tiene el pelo despeinado y ella se humedece cuando lo ve. La escena se repite cada 10 página. El está sobre la cama con la camisa de lino arrugada, el pelo despeinado, y ella que es una adolescente con cero experiencia se calienta y se humedece. Por dios, que increible que la tipa se haya hecho millonaria con semejante imbecilidad. Diganmé que en el segundo tomo la escritora se interioriza un poco en las complejidades de una relación sadomasoquista, y que no sigue con la misma cantinela de la camisa de lino blanco arrugada con un faldón salido y esos dialogos imposibles.
El paisaje de Arrifana es impresionante. Acantilados y bosques, y caminos de montaña. Todo salvaje, limpito, hermoso. Una postal, lo que se dice.
La verdad que yo comprobé, una vez mas, que a mi el mar ni fu ni fa. Odio el aire de mar. No entiendo cual es la gracia de respirar tanta agua. Ni te digo escuchar las olas las 24 horas del día. Que ruido por favor. En fin, todo muy lindo, pero a mi dame desierto. Pero, la verdad, es que todo lo que se haga con una niña de 4 y un niño de 1, está teñido por ese hecho. Ocupan mucho espacio mental, entonces uno tiene poca espacio para impresionarse con cosas como los paisajes impresionantes. Las olas me impresionaron, eso si, media hora en ese mar y salía temblando, que batidora. Para colmo eso de sacarse el wet suit, y ponerselo, y acarrear la tabla, pufff, correr me va mucho mejor, o andar en bici. Mucha complicación el surf.
Que belleza es Rosa Pomar.